Jugar en la naturaleza tiene múltiples beneficios para los niños.
SALUD FÍSICA Y MENTAL
- Aumenta la actividad física, previniendo la obesidad infantil.
- Reduce el estrés y los síntomas de déficit atencional (Moore et al. 2009)
- Mejora el desarrollo psicomotor (Fjørtoft 2004, 2001)
POTENCIAL PEDAGÓGICO
- Mejora la confianza, la resolución frente a problemas y los ayuda a medir riesgos.
- Aumenta la creatividad, imaginación e inventiva (Dayment 2005)
- Incentiva la estimulación sensorial, y a un mayor conocimiento del entorno
- Mejora resultados académicos (Wells 2000, American Institute of Research 2005)
JUEGO LIBRE - FORMACIÓN DE VALORES
- Promueve la cooperación entre niños, mejorando el ambiente escolar (Moore et al. 2009).
- Inculca en las futuras generaciones los valores de la sustentabilidad: amor y cuidado a la naturaleza.
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